Una tarde de juegos, culturas y aprendizaje para celebrar la riqueza de la diversidad desde la infancia.
La tarde de este miércoles 21 de mayo, el parque de Würzburg, en el barrio Garrido, se convirtió en un espacio de encuentro, juego y convivencia intercultural, con motivo de la celebración del Día de la Diversidad Cultural.
La actividad, organizada por la Mesa de la Infancia de Salamanca, de la que forma parte activa Cáritas Diocesana de Salamanca, reunió a más de 250 niñas y niños de todas las edades, culturas y religiones.
Cáritas contribuyo a esta jornada como parte de su compromiso con la infancia, la inclusión y la promoción de valores fundamentales como el respeto, la solidaridad y la convivencia. Una celebración que incluyó actividades lúdicas y educativas tan variadas como talleres de cocina, escritura y henna, juegos de ingenio, dinámicas culturales, actividades deportivas y música. Muchas de ellas coordinadas por profesionales y personas voluntarias de las entidades participantes, demostrando una vez más el valor del trabajo en red.
Uno de los momentos más significativos fue ver a los propios niños explicar a otros menores cómo se juega en su país de origen. En palabras de Miguel Ángel Martín, profesional de Cáritas Salamanca, “queremos que niños de diferentes países, lugares, religiones y culturas se encuentren y se diviertan juntos en juegos diversos. Ellos mismos están compartiendo sus tradiciones, explicando cómo es ese juego en su cultura”.
El objetivo de la jornada, además del disfrute, fue claro: fomentar el encuentro, el reconocimiento de otras culturas y el valor de compartir desde la infancia. “La diversidad cultural no solo enriquece a nuestros niños, sino también a nosotros como sociedad”, añadió Martín.
Desde la Mesa de la Infancia, que agrupa a las entidades Cáritas, Cruz Roja, Fundación Secretariado Gitano, Cepaim, TAS, YMCA, Santiago Uno, Junior y Asecal, trabajamos de forma conjunta para promover los derechos de los niños y niñas en Salamanca, tal como ha demoiestrado este enbcuentro.
En Cáritas Diocesana de Salamanca reafirmamos nuestra apuesta por la infancia y su desarrollo integral, especialmente en contextos de diversidad y vulnerabilidad. Porque creemos que el respeto se aprende desde pequeños, y que la diversidad es una riqueza que educa, transforma y une. Una vez más, alzamos la voz para recordar que “con los derechos de la infancia no se juega”.