11 personas que realizan voluntariado con infancia y adolescencia en Cáritas participan en una sesión formativa para mejorar la atención a los menores de edad y prevenir ante posibles situaciones de maltrato.
En 2021, con la entrada en vigor de la Ley Orgánica 8/2021, de 4 de junio, de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia (conocida como Ley LOPIVI), se establece un marco legal fundamental en España que sitúa el interés superior del menor como principio rector y reconoce a todos los niños, niñas y adolescentes como sujetos de pleno derecho. La ley pone un fuerte énfasis en la prevención, buscando evitar situaciones de violencia antes de que ocurran.
Cáritas Salamanca ha desarrollado acciones de prevención activas orientadas a la protección integral de los niños, niñas y adolescentes. Con esta nueva jornada formativa dirigida a su equipo de voluntariado y personas colaboradoras, la entidad da un paso más hacia la creación de entornos seguros y protectores para los menores de edad. Esta iniciativa subraya el compromiso de la organización con la protección integral de la infancia y la adolescencia y la prevención activa de cualquier forma de violencia.
La formación, dirigida a todo el personal voluntario que trabaja de forma habitual con menores, abordó temas cruciales como la creación de un entorno seguro, la identificación de señales de riesgo, el protocolo de actuación ante posibles situaciones de violencia y la obligatoriedad de comunicar cualquier situación de riesgo. “Todos los profesionales y colaboradores que interactúan con niños, niñas y adolescentes deben recibir formación continua en prevención, detección y actuación frente a la violencia”, señaló Mercedes González, Delegada de Protección de la entidad.
Antonio, voluntario de Cáritas, destacó el valor de esta iniciativa afirmando: “A los que nos educamos con niños, niñas y adolescentes nos preocupa garantizar su seguridad. Y este es el espíritu que anima la LOPIVI. Es el marco legal que nos capacita para detectar y prevenir la violencia, crear espacios seguros donde se puedan desarrollar plenamente, promoviendo la cultura del buen trato”.
Esta medida proactiva no solo busca cumplir con las disposiciones legales, sino también fomentar una cultura de buen trato y cuidado, integrando la perspectiva de derechos de la infancia en todas las acciones. Existe un compromiso firme para sensibilizar, visibilizar y concienciar sobre el impacto de la violencia en la vida de los menores, y para movilizar a la comunidad en su protección. Cáritas se suma así a estos esfuerzos, garantizando que su voluntariado esté plenamente capacitado para ser agentes de cambio y protección.
La formación ha estado a cargo de la Delegada y la Subdelegada de Cáritas Salamanca, quienes también presentaron el procedimiento de actuación establecido para comunicar situaciones de riesgo.
Un recurso financiado por el IRPF de la Junta de Castilla y León (Proyecto CRIA y Proyecto FAVORECE), el Ayuntamiento, junto con fondos propios
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