Usuarios y profesionales del Centro de día Ranquines de Cáritas Salamanca comparten su experiencia con la concejala Miryam Rodríguez en un encuentro que reivindica empatía, derechos y verdadera inclusión.
Este miércoles, el Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Salamanca se ha convertido en altavoz de una realidad que merece escucharse: la de las personas con problemas de salud mental en situación de exclusión. Miembros del Grupo de Ayuda Mutua (GAM) encargados de la celebración del ‘Orgullo Loco’ en el Centro de Día de Salud Mental Ranquines, han sido recibidos oficialmente por la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Miryam Rodríguez, en un acto que sirvió para visibilizar su situación, desafiar estigmas y reivindicar espacios de dignidad.
Durante el encuentro, Coral Sánchez, una de las participantes en el proyecto, tomó la palabra para animar a toda la sociedad a “seguir desafiando los mitos sobre la salud mental”. Su intervención fue un testimonio directo de resiliencia y compromiso. “Queremos una sociedad donde nadie se sienta solo, donde los derechos humanos sean la base de nuestra convivencia y donde cada persona tenga la oportunidad de brillar”, expresó. Y añadió: “Escuchar sin juzgar, hablar sin miedo y actuar con empatía”.
La reunión contó también con la presencia de María García, concejala del Grupo Socialista; José Manuel Lázaro, coordinador del Centro Ranquines; José María Rodríguez, secretario general de Cáritas Salamanca; y Carmen Calzada, directora de la entidad. Un acto simbólico en el que las personas participantes fueron reconocidas como protagonistas de su proceso y no como meros destinatarios de ayuda.
La concejala Miryam Rodríguez reafirmó el compromiso del Ayuntamiento con proyectos como Ranquines, que atienden a los colectivos más vulnerables desde una atención personalizada y respetuosa. “Invertir en políticas sociales es invertir en personas”, aseguró, destacando que seis de cada diez euros del presupuesto municipal se destinan precisamente a este fin. “Salamanca es un ejemplo a seguir por su amplio y consolidado escudo social”.
Desde Cáritas Salamanca, agradecemos la acogida institucional del Ayuntamiento y el reconocimiento al trabajo realizado desde Ranquines. Porque no se trata solo de prestar servicios, sino de construir relaciones humanas que dignifiquen y ofrezcan oportunidades reales a estas personas.
Un centro para reconstruir vidas
El Centro Ranquines, gestionado por Cáritas Salamanca, es un recurso especializado en la atención integral y continuada a personas con problemas de salud mental en situación de exclusión social. Su enfoque combina el acompañamiento profesional con el impulso a la autonomía personal, la cobertura de necesidades básicas, el apoyo a la salud y la rehabilitación comunitaria. Todo ello orientado a que cada persona pueda retomar su proyecto de vida y desarrollarse en plenitud en el ámbito personal, social y laboral.
Ranquines apuesta por la escucha activa, la participación y la recuperación del sentido vital, promoviendo espacios de expresión y empoderamiento donde las personas pueden compartir experiencias, combatir el estigma y alzar la voz con orgullo, sin miedo ni vergüenza.
Un proyecto cofinanciado por el IRPF de la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento y la Diputación de Salamanca y Fundación la Caixa, junto con fondos propios.